Covid-19: Desinfección y prevención en ambientes de trabajo.

 

Nos encontramos al principio de lo que se ha denominado “desescalada” de la situación de confinamiento. Me gustaría poner aquí algunas reflexiones y consejos en lo relacionado con la vuelta a la oficina, al lugar de trabajo.

Primero quiero comentar algunas ideas sobre desinfección.

Todos queremos volver en condiciones de seguridad. Si bien, como en todo, la seguridad absoluta no existe, un buen nivel de desinfección del puesto de trabajo puede hacernos la vida más segura, más fácil, más cómoda a nosotros y a nuestros empleados.

Lo primero somos nosotros mismos. Hemos adquirido el hábito de lavarnos las manos con jabón frecuentemente. Para los entornos de trabajo recomendamos los geles hidroalcohólicos. En general se aplican 1 vez cada hora, por lo que será adecuado proporcionar al personal dispensadores muy cercanos al puesto de trabajo. Mejor aún si les proporcionamos un dosificador personal.

Desde anchamar distribuimos equipos IT de todo tipo: portátiles, equipos desktop, impresoras, comunicaciones, etc.. Todos de rango empresarial. En general, para desinfectarlos bastará con limpiarlos concienzudamente con alcohol de farmacia y una bayeta limpia (o es su defecto algodón). Es imprescindible desechar la bayeta tras su uso.

Para la limpieza de superficies (mesas, pomos de puertas, mostradores etc..) hay varias posibilidades:

  1. Disolución de 25 ml de lejía en 1 litro de agua. Se tiene que utilizar con guantes y en el momento de su preparación, pues el principio activo de la lejía, el Cloro, tiende a evaporarse y perder efectividad. La ventaja es que por un lado es muy fácil y barato y por otro está confirmado que elimina el Coronavirus. La desventaja es que decolora las superficies y no se puede usar sobre textiles (moquetas, cortinas etc..). Por otro lado al aplicarse con una bayeta de algodón tiende a mojar demasiado y esto hace que no sea adecuado para equipos, teclados etc..
  2. Los fabricantes de productos de limpieza profesionales han desarrollado algunos productos específicos, prescindiendo de lejía, que además tienen un cierto efecto residual, es decir, que actúan a lo largo del tiempo. Nosotros tenemos conocimiento del producto OXIDES de la empresa Albarri (Madrid). Se aplica con un spray pulverizador, se pasa una bayeta de microfibra y listo. Seguro que hay más fabricantes, pero si alguien está interesado, le podemos hacer llegar los datos de esta empresa y, en la medida de lo posible, agilizar los trámites.

Por último, para desinfectar zonas más grandes, espacios de trabajo, y no sólo el mobiliario doy dos orientaciones:

  1. El vapor de agua: existen máquinas de limpieza con vapor de agua a 160º y con presiones entre 6 y 8 bares. Suficiente para eliminar el coronavirus. La principal ventaja es que solo necesitas agua, ningún químico. Estas máquinas son caras, pero se pueden contratar cuadrillas que las llevan y, en algunos casos, se puede alquilar la máquina.
  2. Ozono. La OMS ha repetido en varias ocasiones que el Ozono (O3) es un desinfectante muy eficiente para todo tipo de microorganismos. Se trata de un gas que puede penetrar por todos los huecos y actuar sin más. No necesita una preparación previa de la habitación, sala, despacho etc… Además, no deja residuo y tampoco mancha. Se puede adquirir un pequeño generador de Ozono o bien se puede contratar el servicio a una empresa especializada.

Con respecto a la prevención quiero deciros que hemos recibido muchas consultas sobre los sistemas de detección de temperatura. Se tratan de cámaras que son capaces de detectar la temperatura de la gente que entra en un local. Cuando detectan a una persona con temperatura por encima de un umbral preestablecido, se activa una alarma. También las hay que son capaces de detectar mascarillas, distancias entre personas etc… Para todos estos casos hay que tener en cuenta el RGPD, pues la toma de temperatura supone el acceso a un dato de carácter personal de salud, es decir, especialmente protegido.

A este respecto sabéis que podéis poneros en contacto con nosotros para solventar los problemas que esto pudiera presentar.

 

Espero que estas reflexiones os sirvan para gestionar algo mejor esta “desescalada”.

 

Antonio Chacón